El reemplazo de las cocinas a gas por cocinas eléctricas de inducción ha motivado cambios en los nuevos proyectos inmobiliarios de Quito, en las instalaciones de sistemas de cocción y calentamiento de agua.
Estos cambios se están registrando también en inmuebles donde se usan actualmente sistemas de gas centralizado, muy utilizado en edificios construidos en años recientes.
Ahí, los departamentos se abastecen de gas a través de tuberías que conectan a una gran bombona, con capacidad para cubrir el consumo de cocinas y calefones. En otros casos, el agua se calienta en un caldero a gas que distribuye el líquido a cada domicilio.
Osvaldo Rivadeneira, representante de la constructora Proaño y Proaño, explica que para el edificio Élite Plaza II –obra que se está entregando estos días a sus propietarios- el sistema planificado para las cocinas y el calentamiento de agua era de gas centralizado.
Pero tras el anuncio del Gobierno, de reemplazar las cocinas de gas por las de inducción a partir de agosto próximo, cuatro propietarios pidieron cambio en las instalaciones.
Rivadeneira explica que la conexión para 220 voltios (v), que es el voltaje requerido para las cocinas de inducción, se pudo hacer desde la caja de brakers, a través de canaletas, hacia el enchufe de la cocina.
En esta construcción no fue necesario un cambio de medidores, ya que todos son bifásicos y cumplen lo que se requiere para las nuevas cocinas.
El transformador también soporta la mayor demanda de energía por las nuevas cocinas. Advierte que en este edificio, los usuarios podrán elegir si utilizan el gas o la electricidad para la cocción de alimentos.
Pero para nuevos proyectos inmobiliarios que levanta la constructora Proaño y Proaño, como el edificio Plaza Garden, que estará listo en el 2015, solo estarán habilitados sistemas eléctricos, tanto para las cocinas como para calentar el agua.No habrá gas centralizado y se instalará un caldero que funcionará con electricidad para las duchas en apartamentos.
Rodrigo Andrade, presidente de la constructora Andrade-Rodas, cuenta que los edificios entregados en estos meses tienen aún sistema de gas centralizado pero cuentan también con un toma corrientes de 220v que sirve para los propietarios que deseen implementar una cocina de inducción.
Pero indica que los nuevos proyectos de departamentos Tennis 4 y Tennis 5, ubicados en el sector Quito Tenis, en el norte de la capital, solo tendrán sistemas eléctricos.
Estos proyectos se entregarán entre finales de este año y mediados del 2015. Además de tomas para cocinas de inducción, dispondrán de termostatos o calefones eléctricos para la provisión de agua caliente dentro de los departamentos.
Para las áreas comunales de piscina e hidromasajes, el agua se calentará con sistemas de paneles solares.
Édgar Barrionuevo, representante de Urbicasa, narra un escenario similar.
Los edificios entregados en estos meses disponen de sistemas mixtos, es decir, tienen tres tomas de 220 voltios para conectar una cocina de inducción, un horno eléctrico y una secadora de ropa.
Pero estas unidades habitacionales también tienen sistemas de gas centralizado para alimentar a cocinas de gas.
Pero las tres edificaciones que actualmente están en construcción y que se entregarán a finales de año prescindirán del gas centralizado. Para el calentamiento del agua se instalarán bombas de calor eléctricas, que son semejantes a los equipos de aire acondicionado. Se ubican en las terrazas de los edificios.
Pese a que estos cambios se están dando en proyectos de departamentos, en conjuntos de casas se oferta más un sistema mixto de electricidad y gas.
Verónica Reyes, de CR Constructora, comenta que aún se está evaluando qué sistema será más conveniente, ya que si bien se espera el retiro del subsidio al gas en el 2016, las cocinas de inducción y los sistemas de calentamiento de agua eléctricos también encarecerán las planillas de energía.
Eugenia Calero, representante de Casa Innoconstructora, sostiene que en viviendas nuevas de entre USD 35 000 y USD 48 000 se han instalado conexiones de 220v para cocinas de inducción y también instalaciones de gas.
Esto es para que el propietario elija qué sistema desea en función de su presupuesto.
Este Diario visitó además tres edificaciones donde se utiliza gas en bombonas y gas en el norte de Quito.
En las tres indicaron que aún no se han implementado nuevas conexiones de 220v para las cocinas de inducción; sin embargo, se tiene previsto reuniones con los propietarios de los departamentos para determinar cómo se llevarán a cabo este tipo de cambios.
Los administradores de estos inmuebles indicaron que tampoco hay apuro en implementar las nuevas instalaciones porque el subsidio al gas se mantendrá hasta el 2016.
Alex Tipán, gerente de Inteltronic, empresa que realiza diseño y sistemas eléctricos, indica que en el último mes ha recibido seis pedidos de pro formas para realizar conexiones en domicilios para las nuevas cocinas de inducción.
Sin embargo, aclara que los clientes no se han decidido aún por hacer los cambios debido a que todavía se mantendrá el subsidio del gas durante los próximos años.
En contexto
El presidente Correa anunció en abril pasado que desde agosto se implementará el cambio de cocinas de gas por cocinas de inducción de alta eficiencia para reducir el subsidio al gas. Este bordea los USD 700 millones al año. El subsidio al gas será retirado en el 2016.
Alberto Araujo. Redactor